Estamos presenciando un solapamiento creciente entre el mundo real y el mundo virtual, por lo que, el tema del Día Mundial de la Vida Silvestre de este año es particularmente apropiado.
El tema “Conectar a las personas con el planeta: Explorando la innovación digital en la conservación de la vida silvestre” también nos recuerda la importancia de utilizar todas las herramientas disponibles para proteger y conservar nuestro mundo natural.
Ya sean soluciones basadas en la inteligencia artificial para detectar y analizar actividades delictivas en línea, imágenes de satélite para identificar la pesca ilegal o drones para vigilar los sitios de tala ilegal, la tecnología tiene una función que desempeñar.
Es imprescindible garantizar que los investigadores tengan las herramientas y la formación adecuadas para combatir los delitos contra la vida silvestre, tanto informáticos como sobre el terreno.
Vinculados con otros delitos que incluyen blanqueo de dinero, contrabando de armas, tráfico de drogas y corrupción, los delitos contra la vida silvestre representan una grave amenaza para la protección y seguridad de las comunidades, y también para su desarrollo económico.
Además, el cambio climático, la pérdida y modificación de hábitats y la falta de diversidad biológica pueden afectar a la salud de los ecosistemas, lo que supondría un mayor riesgo de enfermedades para la vida silvestre.
INTERPOL ayuda a desbaratar y desmantelar las redes delictivas organizadas transnacionales responsables de estos delitos y a contribuir así a la protección de los ecosistemas más amplios, con el objetivo final de lograr un futuro más verde.